El candidato unitario de la oposición venezolana en los pasados comicios presidenciales del 28 de julio, Edmundo González Urrutia, descartó nuevamente que planee juramentarse el 10 de enero fuera del país.
De esta manera descartó también la conformación de un gobierno desde el exilio, a pesar de que el gobierno de Nicolás Maduro insiste en tildarlo como un «Guaidó 2.0».
«Ninguna de las dos. Mi juramentación será en los términos de la Constitución, en Venezuela, ante los órganos legislativos que son los que están aprobados para hacer esa juramentación», aseguró en una entrevista concedida a la periodista Idania Chirinos, en NTN24.
En este sentido, destacó que existe un plan para tomar constitucionalmente el poder, luego de que la oposición afirma haber demostrado, con las actas recabadas por sus testigos electorales, que González fue el verdadero ganador de los mencionados comicios.
«Esos planes no se revelan, porque ya me dijeron que tenían una comitiva esperándome», señaló el exdiplomático, ante las amenazas del ministro de Interior y Justicia de Nicolás Maduro, Diosdado Cabello, quien aseguró que están listos para arrestarlo si regresa al país.
BLINKEN LO LLAMÓ PRESIDENTE ELECTO
Por su parte, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, dejó este martes en claro la posición de la administración de Joe Biden en cuanto a los resultados de las elecciones del pasado 28 de julio, durante su participación en la cumbre del G20, que se lleva a cabo en Río de Janeiro, Brasil.
«El pueblo venezolano se pronunció contundentemente el 28 de julio y nombró a Edmundo González presidente electo. La democracia exige respeto a la voluntad de los votantes», subrayó el jefe de la diplomacia estadounidense durante su intervención en el foro.
Esta sería la primera vez que un alto funcionario de la administración del mandatario demócrata se refiere a González Urrutia como «presidente electo», luego de cuatro meses de exigir la presentación segregada de los resultados electorales.
Tanto el gobierno norteamericano como la Unión Europea, habían evitado usar ese término y apuntaban a esperar la juramentación de un nuevo período presidencial en Venezuela, que arrancaría el próximo 10 de enero.