El migrante venezolano José Ibarra, de 26 años, fue condenado a cadena perpetua sin libertad condicional por el asesinato de Laken Riley, una estudiante de enfermería de Georgia, Estados Unidos.
Ibarra había sido declarado culpable el miércoles 20 de noviembre por un total de 10 cargos, entre ellos asesinato, secuestro con lesiones corporales, agresión con agravantes con intención de violación y manipulación de pruebas, de acuerdo a la información citada por CNN.
El juez del Tribunal Superior del condado de Athens-Clarke, H. Patrick Haggard, llegó al veredicto tras escuchar las pruebas y testimonios de los peritos y agentes de la ley, así como de los compañeros de piso de Ibarra y Riley.
Riley fue hallada muerta el pasado 22 de febrero en una zona boscosa cercana al sendero de la Universidad de Georgia que visitaba a menudo. Fue golpeada varias veces en la cabeza con una piedra y asfixiada, según los documentos judiciales.
La familia de Riley lloró cuando se anunció la primera decisión de culpabilidad. Su madre y su hermana describieron el impacto que tuvo la muerte de Riley en sus vidas durante sus declaraciones antes de que el juez dictara la sentencia.
«Este monstruo nos arrebató la posibilidad de ver a Laken graduarse en la escuela de enfermería. Nos quitó la posibilidad de conocer a nuestro futuro yerno. Destruyó nuestras posibilidades de conocer a nuestros nietos. Y se llevó a mi mejor amiga», dijo la madre de Riley, Allyson Phillips.
La mujer describió a su hija como «inteligente, trabajadora, amable, considerada y una hija de Dios».
Ibarra permaneció con la mirada baja mientras se leía la sentencia. Según el medio de noticias estadounidense, el migrante venezolano mostró poca emoción a lo largo del juicio.
El miércoles, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, celebró la sentencia contra el venezolano.
En su cuenta de X, Trump señaló que en su nuevo gobierno “garantizará” que otras familias no tengan que pasar por un proceso similar; para ello, anunció la próxima aseguración de la frontera y planes para “expulsar” a los migrantes “criminales y matones” del país.
“El ilegal que mató a nuestra querida Laken Riley acaba de ser declarado culpable de todos los cargos por sus horribles crímenes. Aunque el dolor y la angustia durarán para siempre, esperamos que esto pueda ayudar a traer algo de paz y cierre a su maravillosa familia que luchó por la justicia”, destacó.